S I R E N A Rompe el Duende la mágica superficie del agua que espejea nubes y cielos y el plano aire caliente de la tarde quieta La Guardia atenta ve como el Duende dentro del agua se convierte en sirena: La criatura más bella que sus ojos vieran Se desliza suave, veloz, camuflándose de nubes, de cielos, de soles del aire caliente de la tarde quieta ¡Oh júbilo del agua! al dibujar su rostro sonriente emergiendo en la luz de la tarde al aire caliente de la tarde quieta a los ojos de aquellos que atentos y atónitos miramos la criatura más bella que ninguno nacido, antes viera... Luis de Pablos
|
Poema siguiente: Yo seré Yo