CUANDO MUERA LA ROSA
Al sol y al agua y a todos los vientos
expongo yo mi rostro
ajado ya
Mi rostro atento
a ser Luis y no otra cosa
Tristeza de sentir
Alegría, alegría de ser
aunque duela tanto y tan adentro
Qué felicidad la de la rosa
que siendo simplemente rosa es todo
Todo lo preciso y necesario
Todo lo justo
Todo lo bueno
Hasta el fin de los tiempos
o hasta que su molde ajado
quizá ya, se agote extenuado
y muera para siempre la rosa
y con ella, algo de todas esas primaveras
Todos esas amadas y viejas primaveras
Me iré yo, y se irá nada
Se irá nada
Ni tan siquiera mi atento doler
para ser yo, para ser Luis
pervivirá mi ausencia
Sólo tu dolor, mujer, sólo tu dolor
mientras que vivas
guardará mi recuerdo
y en tus secretos sueños más allá
de la noche
Sólo mientras que vivas
después ya, silencio
Ni tan siquiera dolor
Sólo silencio.