CONTARLE A LA VIDA
Estoy aquí esperando
a que escampe
el silencio de las sordas palabras
para contarle a la vida
que siempre ha sido mía
camino de la aurora
Que cuando pacta la luna
con la noche el brillo
de las estrellas
y negocia el sol con las flores
de las amapolas el rojo
Sus ojos me miran sonriendo
Sus ojos que lo alumbran todo
ven la vida en mi
en este hombrecillo
canoso y gris
como esos viejos gatos
que rezan a las tapias
sus discursos marchitos
Y estoy aquí y ahora
plantando como una bandera
la esperanza
hecha de luz y de nieblas
compuesta de arco iris
y de margaritas de agua
y de sonoros jazmines
colgados de las vallas
Estoy aquí y ella me acompaña
Qué más puedo decirle
contarle a la vida
Qué más puedo hacer
si mueren a los lejos
esos atroces gritos
y el agua aún se tiñe de negro
en esos viejos pozos
Si ella me ama
y me llama a su lado
y me nombra testigo
y me dice su amado
y me ciñe entero
con esos dulces brazos
Qué locura no haría
Qué silencio negara
y no puedo hacer nada
más que dar testimonio
de que a veces
Algunas pocas veces,
el amor es quien gana.