Semillas de sol
festejando la noche
Ese inmenso terciopelo negro
que no se acaba nunca
Y tus sonámbulos ojos
mirando mi frente
Y tus sonámbulos ojos
coronándola de rosas sin espinas
De jazmines de plata
De lirios de agua
Eres tú quien decide
ahuyentar a la muerte
Eres tú quien decide
ahuyentar a la muerte
entregándote toda
Más allá de tu cuerpo
Más allá de tu cuerpo
sin fronteras ninguna
Y me acoges en el dulce
centro de tu carne
Y en el laberinto
sabio de tus manos
describes mi cuerpo
Semillas de sol
Atónitas estrellas
contemplando tu gloria
Gloria mortal y pura
como un amanecer
en estos días de Julio
en que el sol
ha conquistado la noche
En los que el sol
ha conquistado
para siempre la noche
Y tú, tú has decidido
una vez más
ahuyentar a la muerte.
AHUYENTANDO A LA MUERTE
Luis de Pablos